Una joya de la arquitectura de la época colonial dentro de la ciudad de Cuzco es la iglesia de la Compañía de Jesús, una de las iglesias con historia de este destino peruano. Esta iglesia se encuentra cerca de la famosa Plaza de Armas de la ciudad, en pleno centro de Cuzco y cerca de la iglesia de Santa Catalina y de la catedral.
Es una construcción que presenta un estilo barroco que se puede ver en la fachada, que tiene gran variedad de elementos. La iglesia se construyó a partir de 1571 donde anteriormente se encontraba el palacio Inca Huayna Cápac gracias a la donación a los Jesuitas de Diego de Silva, que le compró los terrenos a los herederos de Hernando Pizarro. Tras el terremoto de 1605 la iglesia tuvo que se reconstruida, con la participación de Juan Bautista Egidiano para la traza de la iglesia y con Diego Martínez de Oviedo para el diseño de la fachada.
Dentro de la iglesia nos encontramos con obras de arte Diego de la Puente, Marcos Zapata y Cristo de Burgos. Un elemento importante es el altar con una cubierta de pan de oro y en la entrada podemos ver una talla de la Virgen de la Inmaculada Concepción, además de apreciar dos capillas en el interior. En el Altar Mayor se pueden ver diferentes retablos barrocos y platerescos, además de observar el púlpito hecho en madera. Se puede ver la Transfiguración del Señor, que es un estupendo lienzo.
La compañía de Jesús
Se puede conocer la iglesia de 10 a 11:30 horas cada día excepto los jueves y domingos, además desde las 14 a 17 horas en la tarde. El precio para acceder al templo es de unos 16 soles para adultos y la mitad para estudiantes, entre 5 y 2,5 euros respectivamente.
La Iglesia de la Compañía de Jesús, en su interior, posee una sola nave donde resalta al fondo el imponente altar mayor tallado con estilo híbrido en cedro y completamente dorado con hojas de oro. Mide 21 metros de altura por 12 de ancho y en la porción central del altar se halla la imagen de la Virgen de la Inmaculada Concepción, más arriba un lienzo representando la Transfiguración de Jesús. La nave principal ostenta además un transepto que comunica con las dos capillas laterales, seis altares con diversos estilos y un púlpito totalmente dorado; hacia los costados del altar mayor se hallan otros 4 altares de cedro, tres de ellos dorados y bastante ostentosos.